Recuerdo que lo primero que utilicé, con mis inolvidables quince años, fue el correo
electrónico y el ahora anticuado Messenger.
El correo electrónico sigo usándolo, aunque ya con otro fin y no con la misma
cuenta que entonces. El Messenger pasó a mejor vida.
WhatsApp y Facebook
son las únicas redes sociales que tengo y que, por tanto, utilizo. (No sé si WhatsApp
está considerada una red social, pero la incluyo aquí por unir estas
dos aplicaciones). La primera la uso diariamente, la segunda a veces. Por otro
lado, Youtube y Spotify los uso, más que nada, como vía de entretenimiento. Puedo
pasar horas viendo vídeos o escuchando música... empiezo con algo que me habían
recomendado, por ejemplo, y acabo con algo totalmente diferente que jamás pensé
oír o ver. El buscador de Google lo utilizo
para informarme de cualquier tema, en cualquier momento del día. Para ver películas utilizo VLC
media player. Últimamente suelo coger películas de las bibliotecas para verlas en casa, ya
que Series.ly retiró los enlaces no
autorizados y no he encontrado ninguna otra web que satisfaga mis gustos cinéfilos.
En cuanto a lo académico, el diccionario de la Real Academia Española,
los traductores, el Campus Virtual y la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes son
las plataformas a las que accedo con más asiduidad. Microsoft Word, PDF y Power Point llevan acompañándome ya
unos cuantos años. Son mis aliados preferidos para llevar a cabo los
incontables trabajos de mi época universitaria.
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